Quizás
debería empezar quitándole peso a la pregunta, pero sinceramente, no puedo, ni
quiero, bastante nos encargamos ya en el transcurrir del día a día de
despreocuparnos y no asumir, la Responsabilidad que tenemos en nuestro devenir
emocional.
La
mayor parte de las personas, amanecemos cada mañana, con un plan más o menos
organizado de todas las cosas a las que tienes que dar solución o gestionar
durante la jornada. Tenemos programado el despertador a las 07:00h, nuestro
desayuno y un orden hasta salir de casa.
Ésas
son las grandes cuestiones, las pequeñas (pero no por ello dejamos de
prestarles, mucha atención), son si llevo el móvil o las llaves, si estoy
presentable para la situación o sitio al que voy, y así pequeñas e innumerables
cosas.
Uno
se olvida de que, todos los días, ésos actos y circunstancias, van a ir
acompañados, rodeados y a veces incluso inundados, de vivencias emocionales.
En
todo momento están Pasando, estás Haciendo, estás Sintiendo o haciendo Sentir
cosas. ¿Dónde tienes la mayor sensación de control, en lo que pasa, en lo que
haces o en lo que sientes? Seguro que muchos en lo que hacen, algunos en lo que
pasa y pocos en lo que sienten o hacen sentir a los demás.
Y
es que en la Vida Profesional, la Responsabilidad Emocional, queda muy
desdibujada. Todos somos Responsables, de lo que sentimos y en buena parte en
lo que hacemos sentir, y con un mínimo de entrenamiento, compromiso y atención,
podemos contribuir a cambiar el día de las personas que nos rodean y las de
nosotros mismos.
Las
personas en nuestro trabajo, tenemos las mismas Necesidades Emocionales,
Estima, Pertenencia, Autonomía y Competencia y tenemos que hacernos
conscientes, de que somos capaces de cubrir tanto las nuestras, como algunas de
las de los demás.
Un
profesional necesita, sentir que es bienvenido, acogido y poco a poco que ha
encajado en el equipo. Asimismo que su trabajo es apreciado, que es una parte
importante del engranaje y que en la balanza de su bagaje laboral, pesan más
sus logros y éxitos que sus errores. Pero también es Responsable de
acoger, de reforzar, agradecer y al mismo tiempo ser generador de un clima de
contagio emocional (creador de emociones positivas) y no contaminador (creador
de emociones negativas).
Es
importante también una referencia y sincronía con la empresa, la marca para la
que se trabaja, sentir Orgullo de Pertenencia y un sano equilibrio entre los
valores de las dos partes. Y en éste sentido, también se es Responsable, de
cuidar y fomentar la imagen de la casa, proteger la información que uno maneja
simplemente por el hecho de formar parte del equipo.
La
cobertura de la necesidad de Autonomía, aparece con la delegación y la
aparición del propio criterio profesional que ha de ser respetado por la cadena
de mandos que dirigen el equipo. La Responsabilidad que tenemos en éste
sentido, es la de ayudar a compañeros más jóvenes en rodaje, orientar, guiar y
dejar hacer a los demás, respetando en la misma línea el criterio de otros.
Y por fin la Competencia, o como a mi me gusta y define éste Blog, el Talento, cuando uno puede Poner en Valor, lo que Sabe, Puede y Quiere Hacer, es un momento crucial, en el que se llega a la madurez, al dominio y con ello se es Responsable de ser ejemplo, guía y fomento de las mejores prácticas.
¿Has pensado alguna vez en ello?
Si
no, y es muy posible, porque como te decía, vamos improvisando y dejando que la
vida pase sin saber que se pasa, aquí te dejo unas cuantas pistas de
acciones, que podrán ayudarte en éste nuevo Reto:
1.
Aclara tus expectativas, ¿Qué quieres que pase?, ¿Cómo quieres que vayan
las horas?, ¿Es cómodo estar a tu lado?, ¿Cómo vives contigo mismo?
2.
Muestra confianza, da un voto a los demás, ábrete, conoce y luego ve
conformando tus redes sociales en positivo.
3. Da autonomía, contribuye al crecimiento de los demás, las personas
son tan importantes tan diferentes...;
4.
Animate a probar, a crear/innovar, sal de tus rutinas, déjate retar y
riéte.
5.
Practica el Reconocimiento, Agradece, Celebra los éxitos y todo ello,
tanto para Ti como para los demás, necesitamos refuerzo en Autoeficacia, saber
que hacemos cosas bien e incluso algunas, mejor que los demás.
6.
También Aprende de los errores, por supuesto, son tuyos y seguro que ése
dolor que causaron algo te enseñó (por lo menos que el paso del tiempo, es un
benefactor gratuito).
7.
Fomenta el Orgullo de Pertenencia, difunde las Mejores Prácticas, Da Ejemplo.
Porque es reconfortante ver personas con criterios, con valores, que orientan y
enseñan que cada proceso tiene un tiempo y un camino y que los lugares a los
que uno perteneció y pertenece, lo definen y perfilaron como uno es ahora.
En fin, ¿Cuándo empezamos?¿Mañana? No!
Yo
empiezo Hoy, Ahora;
Gracias
por leerme!
Gracias Nuria,
ResponderEliminarHemos oido mucho sobre Responsabilidad Penal, Social y Civil, pero nadie nos había hablado sobre la Responsabilidad Emocional que todos tenemos que asumir, que como las leyes, su desconocimiento no te exime de Tú Responsabilidad.
El hecho es que como nos pasamos la mayor parte del día viviendo en modo automático, no somos conscientes de casi nada de las cosas que suceden a nuestro alrededor, ni tampoco de las que nosotros mismos provocamos con nuestros actos.
Es más facil echarle la culpa al destino, al tiempo o a cualquier otra cosa que se nos ocurra en cada momento, "Locus de Control Externo", que gran invento.
Gracias de nuevo, Nuria, alguien tiene que despertarnos y llevarnos a la consciencia, devolvernos a la vida.
Xabier Arroyo
La otra mitad de Formando Personas